El 25 de noviembre es un recordatorio sereno de algo fundamental: todas las mujeres merecen vivir con respeto, dignidad y libertad.

Es un día para detenernos un momento y valorar aquello que a veces pasa desapercibido: su capacidad de crear, de impulsar, de transformar y de decidir. Un día para reconocer su presencia en la familia, en el trabajo, en la sociedad y en cada espacio donde dejan una huella profunda. 

Un homenaje a su fortaleza cotidiana

La fuerza de una mujer no siempre se muestra en grandes gestos. Con frecuencia se encuentra en su constancia, en su sensibilidad, en su forma de escuchar y en la manera en que sigue adelante incluso cuando el camino presenta retos. 

Hoy celebramos esa fortaleza de mujer coraje. La visible y la que no se cuenta. La que sostiene, inspira y construye.

Un recordatorio de respeto  y aprendizaje

Este día también nos invita a acompañar desde la empatía, a construir entornos donde cada mujer pueda sentirse valorada, respetada y segura de ser quien es. Espacios donde pueda expresarse con libertad y encontrar apoyo cuando lo necesite. 

Cuando una mujer se siente respaldada, florece. Y con ella también lo hace la comunidad que la rodea. Para esto, la sociedad tiene pendiente una educación emocional que nos acompañe desde el colegio hasta las universidades y continúe en los entornos laborales. Porque somos seres con emociones que no siempre sabemos gestionar y eso tiene su efecto en la convivencia social.

Un 25 de noviembre lleno de conciencia y esperanza

Hoy no queremos hablar de dolor, sino de unión, respeto y compromiso. De un futuro más humano que se construye con pequeños gestos y decisiones cotidianas que tomamos cada persona en el día a día.

Que este 25 de noviembre nos recuerde algo esencial: cuando cuidamos a las mujeres, cuidamos la vida; cuando las respetamos, crecemos como sociedad y cuando las personas caminamos unidas, avanzamos hacia un futuro más justo.

Desde Esacan, creemos en la fuerza de cada mujer y en el impacto positivo que genera cuando puede vivir con libertad y dignidad. Mujeres, que en el día de hoy recibamos un abrazo desde cada corazón y que esta celebración, con el tiempo, sea sólo historia.

Todo nuestro amor y respeto para cada mujer.

Septiembre y octubre traen consigo una mezcla de emociones: ilusión, nervios, expectativas… Aunque ya no estemos en la etapa de la niñez, el inicio de un nuevo curso mantiene esa magia de los nuevos comienzos. Es el momento ideal para recordar que nunca es tarde para aprender, crecer y reinventarse profesionalmente.

En Esacan, cada inicio de curso es una oportunidad para acompañar a nuestros estudiantes en un viaje de transformación personal y profesional. Personas jóvenes y adultas deciden apostar por su futuro, dar un giro a su carrera y formarse en una profesión que les apasiona, incluso dejando atrás años de experiencia en otra área.

¿Sientes un poco de vértigo al leer esto? Es completamente normal. Cuando el ser humano sale de su zona de confort, se encienden muchas lucecitas de alerta: llegan cosas nuevas. Y con ellas, una mezcla de emoción, incertidumbre y oportunidad.

Una metodología diseñada para aprender haciendo

En Esacan, lo ponemos fácil. Nuestra formación presencial y virtual se adapta a las necesidades reales de nuestro alumnado, permitiendo compaginar estudios con la vida personal y laboral. Creemos que la mejor manera de aprender es haciendo, por eso nuestras clases son muy prácticas.

Desde el primer día, los estudiantes trabajan con casos reales o practican entre ellos, siempre guiados por profesionales en activo. Esta experiencia práctica permite ganar seguridad, competencias y preparación para el mundo laboral.

Prácticas reales y bolsa de empleo

Una de las ventajas más valoradas por nuestro alumnado es la posibilidad de realizar prácticas reales en nuestra escuela o en empresas del sector al finalizar el curso. Estas experiencias no solo consolidan lo aprendido, sino que también abren puertas a nuevas oportunidades laborales.

Además, en Esacan contamos con una bolsa de empleo activa, con empresas colaboradoras que buscan personas profesionales motivadas y bien formados, listos para incorporarse al mercado laboral. ¿Eres tú esa persona?

Aprende, crece y transforma tu vida

Cada alumno y cada alumna que inicia un curso en Esacan, inicia algo más que una formación: comienza un proceso de transformación personal. 

Formarse en una profesión no sólo abre puertas a nuevas oportunidades laborales, también refuerza la autoestima, la confianza y el sentido de propósito. 

Más que estudiar: apostar por ti

Aprender es apostar por ti, por tu crecimiento y por la posibilidad de construir el futuro que deseas. Cada curso es un paso hacia una vida profesional más plena y satisfactoria.

Hoy puede ser el comienzo de tu nueva vida profesional

Si estás leyendo esto y sientes que es tu momento, da el paso. Descubre nuestros cursos profesionales presenciales y virtuales y empieza a formarte en aquello que realmente te apasiona.

En Esacan, creemos en las nuevas oportunidades, en las ganas de superarse y en el poder del aprendizaje continuo.

 

Hoy puede ser el primer día del resto de tu vida profesional. ¿Lo hacemos?

TE QUIERO, PAPÁ

En un día como hoy, 19 de marzo, si buscamos inspiración para escribir algo, nuestro querido amigo Chat GPT nos diría “que es una oportunidad para reflexionar sobre la importancia de esa figura que, muchas veces, se convierte en el pilar de nuestra vida. Ya sea por su presencia, su apoyo incondicional o sus enseñanzas, los padres juegan un papel fundamental en el desarrollo de cada uno de nosotros”.

Además, seguiría diciendo que, “aunque el Día del Padre es solo un día del año, su significado debería trascender a los 365 días. Es el día para recordarles lo agradecidos que estamos, no solo por lo que nos han dado, sino por lo que nos han enseñado. Muchos padres son los héroes silenciosos que no buscan reconocimiento, pero siempre están ahí, dispuestos a dar lo mejor de sí”.

No está mal para una IA que también ha tenido “padres creadores”, ¿verdad?

Pero esto es sólo la aportación de la inteligencia artificial y hoy queremos buscar lo auténticamente humano, el sentimiento de lo que es un padre desde la perspectiva, como es el caso, de una hija bien amada que ha tenido la fortuna de disfrutar de una relación maravillosa con su progenitor. Cuando le pedí a esta gran mujer si podía aportar algo para el blog del día del padre, rápidamente y con esta profundidad, me aportó lo siguiente:

En muchas ocasiones el amor que una hija puede llegar a sentir por su padre se convierte en un amor puro, incondicional, un amor bonito y de verdad.

Esto es lo que yo siento por mi padre: es mi amigo, mi confidente, mi cómplice, mi compañero de viaje favorito, un súper abuelo, un súper marido y nos llenaba la casa y la vida.

No tengo palabras para describir el amor tan grande que siento por mi padre, y lo digo en presente porque, aunque ya no estés, siempre serás el amor de mi vida y mi mayor ejemplo a seguir.

“Esto es lo que yo siento por mi padre: es mi amigo, mi confidente, mi cómplice, mi compañero de viaje favorito”

Parece que fue ayer cuando acaricié tu carita por última vez y agarré tu mano tan fuerte que aún te siento conmigo. Cada día, me preguntabas si estaba orgullosa de ti, si habías hecho las cosas bien y hoy, con los ojos llenos de lágrimas, tal como te lo decía cada día, te volvería a decir que sí, que fuiste maravilloso.

Han pasado casi 4 años, pero cada día me levanto y me acuesto contigo, acaricio y miro tu foto, tu recuerdo, tu sonrisa… Cada día tenías algo que contarme para hacerme feliz y cada día llego a casa pensando que te voy a ver, que voy a poder contarte mi día, mis problemas y alegrías y que vas a tener un consejo que me va a aliviar. Parece surrealista, pero así lo siento. Me aferro a ti y te hablo esperando respuesta. Eras hablador, conversador, cariñoso, te gustaban las bromas, la vida familiar, eras trabajador, respetuoso, comprometido, responsable.

¡Te siento tan vivo pa! Tengo presente tu cara, tus manos, tu pelo y hasta tu olor, lloro de tristeza, pero a la vez soy afortunada de poder seguir disfrutándote, aunque sea de esta manera. Sueño contigo muchas noches y me levanto tan feliz… Vuelvo a estar contigo algunas veces.

Hoy es tu cumple, tu santo y el día del padre, y no hay mayor regalo que poder expresarte todo esto que siento por ti.

SÓLO MUERE QUIÉN SE OLVIDA Y YO JAMÁS ME OLVIDARÉ DE TI

Te quiero papá.

Y así fue como esta persona humana habla del Día del Padre, ¿notaste la diferencia con la Inteligencia Artificial?

Y ahora, mientras respiramos pausadamente, tratemos de sostener en silencio todo el AMOR que hay en cada una de sus palabras llevándolo a nuestro corazón.

Gracias, Isa, por tus palabras, han sido profundamente conmovedoras.

¡Feliz Día del Padre!

 

Cada 30 de enero y desde hace más de 60 años, los centros educativos celebran el Día Escolar de la No Violencia y la Paz que, para simplificar, se le llama Día de la Paz. Es una fecha realmente significativa porque conmemora la noche de 1948 en que se le arrebató la vida al mayor líder que ha tenido la “no violencia” en nuestra historia, Mahatma Gandhi. Este abogado indio formado en Inglaterra, practicó la desobediencia civil sin armas en aras de recuperar la independencia de la Indica y su autogestión.

Gracias a la iniciativa de un docente pedagogo, poeta y pacifista, Llorenç Vidal Vida, este día se celebra desde 1964 a nivel nacional e internacional, siendo una inspiración para miles de estudiantes en todo el mundo. En un entorno inmejorable como son las aulas, el alumnado realiza actividades en estas fechas para fomentar la tolerancia, el respeto y la solidaridad, valores que necesitamos que sean desarrollados y renovados en nuestra sociedad.

la noche de 1948 en que se le arrebató la vida al mayor líder que ha tenido la “no violencia” en nuestra historia, Mahatma Gandhi

Los estudiantes, durante los días cercanos a esta fecha, con sus actividades y trabajos, ponen el foco en el fomento de la paz y van buscando caminos que quizá antes nunca se han transitado para alcanzarla o, en algunas ocasiones, para mantenerla. Tener esta oportunidad durante el periodo escolar, como dice su promotor, es “una semilla de no-violencia y paz depositada en la mente y en el corazón subconsciente de los educandos y, a través de éstos, en la sociedad». ¿Se les ocurre mejor espacio de siembra que la mente del alumnado de primaria y secundaria de nuestros centros educativos que serán los próximos líderes, políticos, padres y trabajadores? En definitiva, los próximos ciudadanos y ciudadanos que convivirán en cada país y que votarán a sus líderes.  Estos días, las escuelas del mundo están poniendo un poco de luz en medio de un mundo rodeado de conflictos, más y menos cercanos, que inunda nuestros informativos sin darnos la total esperanza de un fin cercano.

“Una semilla de no-violencia y paz depositada en la mente y en el corazón subconsciente de los educandos y, a través de éstos, en la sociedad».

Lo curioso de esto, es que nuestra sociedad cree que la paz es algo ajena a cada miembro que la componemos, que la paz es un bien intangible que conquistaron nuestros antepasados y que nos va a perdurar para siempre. Quizá por esa creencia de entender que, en nuestro modo de vida “desarrollado”, no hay riesgo de perderla y por eso la reclamamos, solidariamente, para países que llevan una larga historia de conflictos internos y externos. ¿Y qué nos diferencia de nuestros países vecinos? Posiblemente que su cultura es más ancestral y firme que la nuestra, de alguna manera, hemos evolucionado como sociedad incluyendo nuestra tradicional religión que, a fecha de hoy, se muestra más “adaptada” a los tiempos que corren y permite cierta laxitud respecto a los mandatos de los Padres de la Iglesia de hace años.

Pero la paz se construye cada día. La paz es un concepto vivo que cada ser humano puede y debe alimentar desde su pequeño espacio vital. La humanidad no es consciente de la influencia que ejercen en el ambiente nuestros pequeños conflictos familiares, laborales, vecinales o, incluso, con nuestras exparejas. Todas estas “perturbaciones de la paz” son como una onda expansiva que llenan nuestro espacio de inquietudes, desarmonía y cuyo efecto puede llegar a tener un impacto tan lejano, que alcance y alimente las zonas de conflictos armados. Somos todas y cada una de las personas que habitamos este planeta, corresponsables de mantener la paz en nuestro entorno, nutriéndola con entendimiento y conciliación para que crezca, siendo cada quien guardián y cuidador de la armonía en las relaciones humanas que tenemos, incluida nuestra relación interna.

La paz se construye ahora, hoy mismo, en esto momento. ¿Qué estás dispuesto a hacer tú para sostener la paz mundial?